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jueves, 30 de agosto de 2007

Tran y las caricaturas

José Luís Beltrán Coscojuelas ,Tran, se inició profesionalmente en El cruzado de Barbastro, diario aragonés en el que publicó sus primeras caricaturas, pero antes incluso ya había pintado al oleo y con acuarela, realizando varias exposiciones y ganando sendos premios.

Desgraciadamente –dice- tuve que dejarlo porque aquello no era demasiado rentable y resultaba difícil triunfar viviendo tan lejos de una capital. Después vine a Barcelona y aquí ya me especialicé definitivamente en dibujo humorístico, que, a pesar de mis principios, me había tirado siempre”.

Se inició en Bruguera con La Familia Repanocha (Tío Vivo, 1960) y continúo con varios otros personajes como Renato, Ringo y Cándido Palmatoria en la misma década, aunque quizá son más recordadas sus series setenteras como Plurilópez, Tete Gutapercha en las derivadas de Mortadelo, y Jorge y Rosita, Purita, agencia matrimonial o Fanny en las publicaciones femeninas de la casa.

Su afición a la pintura y a la caricatura nunca las abandonó del todo. Respecto a la primera, continuó haciendo periódicamente exposiciones y en la actualidad, retirado ya del cómic, es un pintor reconocido, bajo el seudónimo de Humberto Tran. De su actividad como caricaturista trata esta entrada.

En Bruguelandia a principios de los años 80 fue realizando por encargo de Matías Guiu, director de la publicación, una serie de caricaturas de los principales autores de la casa, como ésta de Ibáñez.


Pero ya en los años sesenta se pueden rastrear algunas de ellas, por ejemplo en esta tira publicada en Tío Vivo en 1962, donde el autor se autocaricaturiza.


De la entrevista de Jaume Périch para la sección El mundo de la historieta en DDT (1968), de la que procede la cita del principio, hemos extraído esta otra versión.


Y finalmente, en una historieta de Cándido Palmatoria, el personaje va a visitar a su creador, un recurso que otros autores como Martz-Schmidt o Escobar han utilizado en más de una ocasión.


1 comentario:

Mortadelón dijo...

Siempre me fascinaron las caricaturas de este autor. Y sus páginas más antiguas (las de los 60) me gustan más que su última etapa de Bruguera, parece que con el paso de los años se acomodara a un estilo un poco más "normalizado", con Plurilópez.